La energía es el talón de Aquiles de toda economía e industria, sin la necesaria energía nada de lo que esta sustentado nuestro progreso tiene sentido.
Toda nuestra tecnología esta pasada por el tamiz energético así que nos crea una dependencia parasitaria de un recurso natural al que sabiamente han puesto precio.
El monopolio del petróleo y la electricidad que nos vampiriza y nos tiene atados de pies y manos e impide que cualquier persona de a pie se salga del sistema.
Existen multitud de formas de generar energía limpia, gratuita y prácticamente infinita, unas formas de generar energía que con poca inversión provocaría la libertad humana para vivir libre de esa dependencia, algo muy altruista y liberador, un progreso que lanzaría a la humanidad y al planeta a un salto incuantificable en su progreso, pero ¿acaso crees que este sistema quiere tu libertad y tu independencia?
Hay que ser muy ingenuo a estas alturas, si aun se cree que las empresas y los gobiernos quieren lo mejor para sus ciudadanos.
Son miles los inventos que quedan en cajas fuertes de grandes compañías, patentes que podrían cambiar el curso de la humanidad, quedan acumulando polvo, por los intereses de estas compañías energéticas, que compran a precio de oro esas soluciones y en caso de dar con un inventor concienciado, no les tiembla el pulso si deben eliminar de un plumazo esa pequeña amenaza.
En este caso más que una conspiración es un lastre, una pesada bola encadenada al pie del progreso humano, una losa con la cual es difícil levantar cabeza, por cierto, cada vez que oigo a alguien hablar de combustibles fósiles y su origen en los dinosaurios, no puedo evitar esbozar una sonrisa, no se porque.
El fin ultimo de este entramado es el de siempre, provocar e impedir nuestro avance, mantenernos descentrados, preocupados y asfixiados.
En cuanto a la tecnología solo llega a nosotros aquella que nos perjudica, nos idiotiza o nos aísla, convirtiéndonos en gotas de aceite caídas en sucios charcos.
Flotamos en un mundo embarrado, pero limpios de responsabilidad, somos esa mosca chocando una y otra vez contra el cristal que nos muestra la libertad, pero que nos impide tocarla.
Nos preocupa mas aparentar lo que no somos que ser lo que deberíamos, nuestra lógica y nuestro sentido común han sido abducidos, creemos que encima de nuestras cejas existe vida inteligente, pero a día de hoy, no ha dado pruebas de su existencia.
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